Autoría: MARÍA JESÚS COSTA RUIZ
Últimamente vemos casi a diario en los medios de comunicación noticias relacionadas con casos de pederastia en la Iglesia. Ciertamente estos casos son espeluznantes, y lo que es peor, son terribles las secuelas que provocan en los niños, que quedan traumatizados para toda su vida. Estoy de acuerdo en que esto provoca sólo un sentimiento de rabia e impotencia hacia estas personas que los cometen, sobre todo porque ellos se han postulado como modelos de conducta. Así que me parece bien la denuncia y condena que está llevando a cabo la Iglesia.
Sin embargo, también me parece injusta la excesiva reacción anticlerical que esto está provocando en nuestra sociedad. Generalizar nunca es justo para un grupo. No me parece bien que cada vez que acusan a un cura de pederastia los titulares de los medios suelen hacer referencia a la Iglesia.
Soy una persona joven y de ideas abiertas y no estoy de acuerdo con todas las directrices marcadas por el Papa, aunque sí lo estoy con otras muchas. Lo que sí tengo claro es la experiencia real que vivimos gracias a muchos sacerdotes que nos acercan a Cristo en cada Eucaristía. A mí me parece que nos transmiten justo lo que necesitamos en estos tiempos de crisis, pesimismo y apatía. Así que animo a los que sientan un vacío en sus vidas que no sepan cómo llenar, que prueben a ilusionarse y contagiarse del optimismo que le pueda hacer sentir que no estamos solos y Cristo nos da fuerza y confianza cada día si tenemos fe en Él.
Sin embargo, también me parece injusta la excesiva reacción anticlerical que esto está provocando en nuestra sociedad. Generalizar nunca es justo para un grupo. No me parece bien que cada vez que acusan a un cura de pederastia los titulares de los medios suelen hacer referencia a la Iglesia.
Soy una persona joven y de ideas abiertas y no estoy de acuerdo con todas las directrices marcadas por el Papa, aunque sí lo estoy con otras muchas. Lo que sí tengo claro es la experiencia real que vivimos gracias a muchos sacerdotes que nos acercan a Cristo en cada Eucaristía. A mí me parece que nos transmiten justo lo que necesitamos en estos tiempos de crisis, pesimismo y apatía. Así que animo a los que sientan un vacío en sus vidas que no sepan cómo llenar, que prueben a ilusionarse y contagiarse del optimismo que le pueda hacer sentir que no estamos solos y Cristo nos da fuerza y confianza cada día si tenemos fe en Él.
YO VOY A LLENAR MI VACIO VIENDO A PERSONAS MURIENDOSE DE HAMBRE, A NIÑOS PEQUEÑOS MURIENDOSE POR ENFERMEDADES CURABLES POR NO TENER DINERO,MIENTRAS EXISTE UN VATICANO PUDRIENDOSE DE RIQUESAS, POR FAVOR A QUIEN QUEREMOS ENGAÑAR, COMO DECIA MARTINEZ ARES, CREO EN ESE CRISTO TAN HUMILDE QUE MURIÓ EN UN MAERO, PERO YO A LA IGLESIA NO LA CREO,DE ECHO ES LA MAYOR EMPRESA QUE EXISTE,QUE MALA SUERTE QUE CON TODOS LOS AÑOS QUE LLEVA NUNCA QUIEBRA,NUNCA SE LE RECORTAN LOS SUELDOS, NUNCA DESPIDEN A NADIE. OME POR FAVOR A QUIEN QUEREMOS ENGAÑAR
ResponderEliminarQuerido amigo, por el tono de tu comentario parece que no has tenido una buena experiencia con la "Iglesia".
ResponderEliminarCuando dices la Iglesia supongo que te refieres a la jerarquía eclesiástica, porque las personas que trabajan en las comunidades parroquiales también son Iglesia. Pues yo tampoco creo en la Jerarquía eclesiástica. Creo en ese Cristo humilde que murió en un madero, como tu dices. Pero desgraciadamente murió hace más de 2000 años y para continuar su misión llamó a un grupo de hombres. Es verdad que han cometido muchos errores a lo largo de la historia, y aún hoy, hay algunos que cometen errores, pero en realidad son humanos como nosotros. En cuanto a las riquezas del Vaticano yo también creo que el Papa debería vender su casa en el Vaticano y vivir de forma humilde, pero no creo que sea tan sencillo ni si él puede deshacerse de ese patrimonio. Pero el modo de vida de los sacerdotes en general es austero: no tienen jacuzzis en su habitación, no hacen viajes de placer, etc. Realizan una labor y cobran una asignación, como las empresas, sí, pero, recuerda que son humanos. De alguna manera tendrán que vivir, ¿no crees?