Amigos, después de casi un año de inactividad, retomamos las publicaciones en nuestro blog con la esperanza y la ilusión de que los temas que aquí se traten sean del interés de nuestros seguidores. Mi primer tema a tratar en este año es un tema de candente actualidad.
Se trata del relevo de José Chamizo al frente de la Oficina del Defensor del Pueblo en Andalucía. Un relevo que llega en el peor momento social por la tremenda situación económica y laboral que está sufriendo la sociedad y que, bajo mi modesta opinión, creo que ha sido más un relevo con tintes políticos que de otra cosa.
De todos es sabido que la llama que ha encendido la mecha de la destitución fue prendida por el propio Defensor al criticar duramente a la clase política. Estos señores son intocables. En el momento que hay una persona que le dice que se están equivocando, se le corta la cabeza. Y no se dan cuenta que lo que hizo el Sr. Chamizo fue simplemete trasladar el sentimiento que tiene la sociedad hacia los políticos y hacia la forma en la que están gestionando la grave crisis que estamos padeciendo. Claro está, y a la vista de los hechos, que en este pais que presume de demócrata no se puede decir la verdad y mucho menos ir en contra de los políticos y su forma de trabajar.
No entiendo tampoco por qué, si es el Defensor del Pueblo, no es elegido por el propio Pueblo. ¿Por qué alguien que tiene que defender a la sociedad tiene que ser escogido por los políticos? ¿No os da qué pensar? ¿Quizá sea para que, al ser escogidos y nombrados por ellos, no se atreva a ir contra ellos? Pero ya que tiene que ser así, deberían dejar de trabajar al elegido aunque la defensa que haga a favor de la sociedad y del pueblo vaya en contra de los intereses de los políticos.
Lo que ha ocurrido con José Chamizo no es justo, no para él, que a buen seguro seguirá trabajando por y para la sociedad, sino para el propio Pueblo. Él se merecía un respeto después de 17 años al servicio de la sociedad, y nosotros más respeto aún por tener que aguantar a una clase política que destituye de su cargo a un auténtico luchador y Defensor del Pueblo que va en contra del que maltrata a la sociedad. Esta sociedad tiene que despertar ya y madurar de una vez por todas. Tenemos que defender lo justo y castigar con dureza lo injusto con la mejor arma que un ciudadano tiene que no es otra que la papeleta que inserte en la urna en unas elecciones. No nos merecemos políticos que destierran al que le hace sombra y elimina al que no está a favor de su gestión.
Sr. Chamizo mucha suerte en su nueva andadura y que sepa que Ud. será siempre D. José Chamizo, Defensor del Pueblo Andaluz, esté en la institución que esté, y serán muchos los que le sigan por el gran trabajo realizado en estos 17 años. Gracias Defensor.